En unas viejas vías de tren y entre frondosos pastos verdes amarillados en la zona oeste de Manhattan, se dio inicio al show primavera verano 2016 de COACH.
Estampados con estampados y más estampados están en la esencia de esta colección. Sea en prendas, accesorios o zapatos, y/o en telas y en cuero: el match de estampados es una realidad que comparte la gráfica de la piel de zebra con una abundante lluvia de flores diminutas acompañada por un estridente color blocking de azules eléctricos, rojo cereza y amarillo amostazado.
En COACH, las colecciones se presentan realmente como ready to wear en todo sentido, desde funcionalidad, comodidad a estética. Los aires setenteros, algo hippies, las faldas y los vestidos por encima de la rodilla resultan cómodos para el día a día. Las clásicas piezas de cuero y gamuza se trasformaron en casacas, chalecos y faldas; todas piezadas y con sensaciones de parchados, dan paso a un COACH divertido y atrevido -vale recalcar que desde el 2014 COACH reinventa su imagen para un público juvenil.
La musa de esta colección esta descrita por el diseñador Vevers como “una chica que va en los viajes por carretera, recogiendo cosas occidentales, pero también podría robar del armario de su abuela en el Upper East Side.”
En resumen, actitud sin esfuerzo es la visión e imagen que COACH nos propone para llevar sin complicarnos todos los estampados queridos y por querer.
