La Pasarela del mundo, Perú
Domingo al mediodía, luego de un verdadero Sábado de Gloria, con las energías a mil y creyendo que el corazón no podría latir más fuerte; tras consumar todo el esfuerzo de un año con nuestra Despampanante fiesta de lanzamiento y con ciertos rezagos de resaca; sonó el teléfono. Un gran amigo nos dijo que vayamos a Barranco nos sorprenderíamos gratamente. Entramos en el departamento de Christian y ahí estaba la diosa de ébano Chanel Iman, sentada con una blusa blanca hasta las rodillas y unos botines militares, con una sonrisa amigable dibujada en su bello rostro y sin ninguna pose de diva. Humana, cercana y amiga; como aquellas que son verdaderas grandes. Se venían otras tops durante la semana y es que el Perú está de Moda, como ya escuchamos tantas veces (hasta el hartazgo) y Barranco, sin duda alguna, es el lugar ideal para cualquier photoshoot. Nuestro distrito Bohemio le abriría las puertas durante la semana a otras grandes. Nos las guardarían de sorpresa. Estaríamos ahí, pero en el momento adecuado serían develadas sus identidades. Algo así como una búsqueda del tesoro. Sería como ir detrás de los huevos de pascua, solo que en vez de encontrar dulces, encontraríamos, a las mujeres más bellas, amables y sinceras sobre la tierra (los últimos dos adjetivos cayeron definitivamente de sorpresa con el transcurso de la búsqueda).
El equipo del Secret Photoshoot estuvo conformado por Christian Duarte en la Dirección de Arte, el Make up artist Sergio Corvacho, Nicolas Eldin encargado del Hairdressing, Almudena Guerra y Keisha Jones para el styling; y el fotógrafo Alexander Neumann, a la batuta.
Durante el photoshoot, Chanel Iman perdía la mirada entre los balcones barranquinos, su sonrisa se hacía notoria y es que la mística bohemia es capaz de encantar hasta al más conocedor. Muchas veces nos olvidamos de las maravillas que tenemos a la vuelta de la esquina, y hace falta ver como nuestra ciudad es capaz de quitarle el aliento a una top de la talla de Iman para entenderlo. Mientras giraba hacia la cámara, siempre ponía su profesionalismo delante, pero apenas sonaba la campana, el ángel de Victoria se perdía entre aquellos callejones guarida de historias tan conocidas y repetidas como aquella que entonan Chabuca o Juan Diego al cantar La Flor De La Canela, y es que las historias de Lima son inmortales, esa quizás fue la enseñanza del primer día, aquel día en el que Chanel Iman se subió a un carrito de D’Onofrio, aquel día en el que nos encantó tanto como a ella le encantó Barranco, aquel día en el que Christian, Alex, Almudena y Sergio reconfirmaron su infinito talento.
La búsqueda, no siguió solo en barranco. Es más, nos llevó trescientos kilómetros al sur. Pero el extenuante trayecto valió la pena. Tan largo rumbo, dio con un igual de grato descubrimiento, conocer a Missy Rayder, maravillosa, sensual y seductora, en aquella bahía donde San Martín tuvo su sueño de libertad. Paracas fue la localidad perfecta, con sus peñascos, el sonido de las olas a lo lejos rompiendo contra las cuevas y las parihuanas elevando el vuelo. Su belleza fue de la mano con la mística del hogar en el que nació el grito libertario y una vez más otra Top du Tops nos hizo sentirnos más peruanos que nunca e hizo que nuestro corazón latiera en blanco y rojo mientras las gaviotas planeaban sobre nuestro litoral avistando un horizonte prometedor. Christian, Alex, Almudena y Sergio al final del día veían las fotos junto a todo el equipo rebosando de la alegría.
Al día siguiente de nuestro corazón salió la gloria de la ciudad heroica. Chorrillos fue el lugar idóneo para reafirmar nuestra peruanidad en el secret photoshot de Harper’s Bazaar y quién mejor que la única e inigualable musa de Testino, la bellísima Juanita Burga. Su implacable, esbelta e imponente figura posó a los alrededores de Chorrillos y su sonrisa bastó para acallar cualquier vestigio de los cañonazos de la Guerra del Pacífico, su cabello al viento, trajo paz y sus manos como las alas de una finísima garza bailaron de felicidad mientras nuestros ojos lagrimeaban y nos sentimos orgullosos, porque cada vez más este camino nos reafirmaba lo maravilloso que es ser peruano, lo maravillosa que es esta ciudad, lo maravillosa que es Juanita.
El final de nuestra búsqueda nos regresó al punto de origen, y es que las grandes enseñanzas de la vida son como un tablero de monopolio, siempre acaban en la partida. Esta vez Alex con su inconfundible sonrisa nos presentó a Wylie Hays, a la vez Cosette,Twiggy, y TinkerBell, un hada de rubia cabellera y sonrisa encantadora. Nadamos en su mirada y esta nos llevó de nuevo por los mismos balcones por los que nos llevó la diosa de Ébano Chanel Iman la semana anterior y reafirmamos la belleza de nuestra ciudad, solo equiparable con la belleza de esas musas del lente experto, es más, solo equiparable con la belleza de la mujer, con la belleza del arte, de la Venus. Todo Dante tiene su Beatriz y el Perú vive plagado de inspiración, de Afroditas por encontrar. Esa fue la enseñanza mayor, que para ser realmente feliz en Lima, no hace falta nada más, solo una sonrisa, solo una sonrisa sincera y amable como la de cualquiera, como la de Wilyie, Missy,Keisha, Chanel, Christian,Nicolas, Alex, Almudena, Sergio o Juanita. Y es que como diría el gran sabio Mario Testino, No seremos perfectos, pero somos Peruanos.
SUPERMODELOS INVANDEN LIMA!
Por LUZ PAPADIMITROU, Fotos de | 15 diciembre, 2013