Antes de presentar a los nominados, hubo muchos momentos que llevaron desde las risas hasta la reflexión: Kristen Wiig y Steve Carell dieron un sketch bastante gracioso para aligerar la tensión de la audiencia, Diego Luna, actor de la última entrega de Star Wars, habló en español demostrando su orgullo hispano, el beso entre Ryan Reynolds y Andrew Garfield luego de haber perdido el globo de oro ante Ryan Gosling. Por otro lado, Emma Stone ganó a la mejor actriz de película y su compañero Ryan Gosling ganó al mejor actor principal, junto con la mejor película de comedia: “La La Land” que ellos protagonizaron.
Sin embargo, ese no fue el único instante en el que el público estuvo atento porque los discursos que se dieron a continuación movieron a la reflexión y un llamado de acción para las masas en general, ya que al pasar la noche no se mencionaba el nombre del presidente electo, pero todos entendían que se referían al presidente Donald Trump. Con el discurso de Meryl Streep invitando a la audiencia, a los actores, al mismo Hollywood y a la prensa a permanecer unidos y cumplir su trabajo con integridad sin necesidad de desviar sus tareas solo porque a una persona con poder no le parezca adecuado.
Para finalizar la noche, Hollywood nos recuerda que este tipo de celebraciones revelan que detrás de cada persona con fama y prestigio, todavía queda la persona que siente y observa. Las personas que pueden sentir empatía por los demás y mostrarlo en sus películas y series, para mostrar que sigue existiendo humanidad incluso en tiempos turbios.
