En el pueblo de Saint-Tropez, por los últimos ocho años, CHANEL ha instalado una boutique temporal de abril a octubre con una original decoración. La Mistralée ha sido transformada por séptimo año para recibir a la casa CHANEL.
Esta vez, Paris se enfoca en la marina. En el interior de la boutique las paredes diagonales rompen la geometría estricta del espacio, monolitos de piedra salen del piso y presentan carteras y zapatos y la colección de Fina Joyería “Coco Crush” y las últimas versiones de los relojes J12 y BOYFRIEND. Al centro del piso, una piedra beige sin pulir, da la bienvenida a una alfombra cuadrada de ladrillos rojos, los cuales forman un elegante mashrabiya, haciendo referencia a edificios parisinos, al igual que el falso techo de ladrillos, que se usaron también para cubrir la casa de piscina.
Suspendido del techo, un riel de 22 metros presenta las piezas de la colección Ready-to-Wear. Además, CHANEL ha recreado un lujoso vestuario hecho a la medida para que los clientes se sientan en casa con completa intimidad al momento de escoger un look. El jardín es una reserva pacífica, las sillas en bronce con cuero llaman a los clientes a sentarse y relajarse.
