Tratamientos médicos en traumatólogos, cremas naturales o masajes especiales en las rodillas son distintas formas para tratar o acabar con el dolor de rodillas; sin embargo, muy pocas personas conocen técnicas de estiramientos que permiten un mejor resultado en el tratamiento del dolor de rodillas: Yoga.
El yoga permite la articulación de ciertos músculos, los cuales no estamos acostumbrados a mover durante un día cualquiera; así mismo, permite combatir con aquellos fastidios en distintas partes del cuerpo como las rodillas. A pesar del uso de este increíble ejercicio, no todas las posiciones son beneficiosas para la resistencia de nuestras rodillas. Por eso mismo LSD te enseña 4 posiciones correctas que combatirán con el dolor de tus rodillas mediante el yoga:
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“La Silla”:
Deberás encontrarte de pie con las piernas juntas, luego colocarás el torso de una manera erguida y doblarás tus rodillas, sin dejar de separar los pies y las piernas, como si estuvieses sentándote sobre alguna superficie. Por ultimo, estirarás tus brazos y manos hacia arriba manteniendo el pecho recto.
A partir de tal posición, todo tu cuerpo se encontrará en un estado de tensión física por lo que se acelerará el proceso de su tonificación y el endurecimiento de las caderas, lo cual logra la obtención de mayor resistencia de tus rodillas al caminar.
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“El guerrero pacifico”:
Tendrás que colocar tu pie derecho un paso adelante con los tobillos derechos 90 grados hacia la izquierda. Así mismo, colocarás tus brazos y la palma de cada mano hacia arriba. A continuación, procederás a colocar tu rodilla hacia delante a la misma altura que e l pie que se encuentra estirado, y así, retrocederás tu pie izquierdo manteniéndolo firme y recto diagonalmente. Para finalizar, estiraras ambos brazos de manera horizontal; es decir que el brazo izquierda irá atrás y el derecho hacia delante.
Esta posición permite mantener la firmeza de la zona lumbar de la espalada y los glúteos, lo que colabora con la firmeza de la rodilla.
Anna Dello Russo en sus clases de Yoga
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“El Puente”:
Como primer paso deberás recostarte hacia arriba. Luego, tendrás que retraer tus piernas y colocarlas de manera vertical. A continuación levantarás los glúteos y el torso formando un arco con tu espalda. Para finalizar juntarás tus brazos por debajo de tu espalda y permanecerás en tal posición por 30 segundos.
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“El águila”:
Mientras te encuentras de pie, dobla las rodillas y cruza la pierna derecha sobre la pierna izquierda, tomando como punto de balance la pierna izquierda solamente. Ahora, deberás envolver los muslos con fuerza en la parte superior uno sobre otro sin espacio en el medio. Por ultimo, podrás envolver tus brazos de la misma manera (de derecha a izquierda) o simplificar la posición colocando los brazos en sentido de oración.
Es la presente posición, ambas rodillas se encuentran dobladas, por lo que se trabaja su articulación. Al mismo tiempo, la acción de envolver las piernas trabaja los muslos y las pantorrillas.