Ejecutada en colores del Panteón Max Mara: camello, coñac, casha, gris y rojo enfático, la mirada es a la vez discreta y girando la cabeza. En la nueva silueta de la falda, los pliegues de la cintura, el glamour desnudo en una sudadera de doble cara de pelo de camello, elegancia insolente en los tejidos que son la clave para el estado de ánimo de esta temporada, cables y costillas.
El argumento principal en la tesis de Max Mara? Il cappotto, el abrigo; cada uno una conjugación perfecta de material, forma, acabado y aptitud para el propósito que encantaría a cualquiera. El más nuevo de todos son los clásicos de la firma realizados en híbridos intrigantes; Cabello de camello ingeniosamente a medida con shearling y abrigos de cardigans unidos de punto que articulan un elegancia chic y juvenil. Su simplicidad engañosa es el fruto de más de medio siglo de experiencia.
Una toma modernista en los cat eye sunglasses, una bolsa deconstructed con un trazador de líneas del shearling que los derrames sobre al exterior, y una bomba puntiaguda punteada terminan la mirada. Max Mara ha defendido a la heroína moderna en su ascenso a la cima – no importa lo difícil que sea, la marca le ayuda a hacer que se vea fácil. Fresco, culto, inquebrantable y de sostén; Max Mara anticipa su empuje final a la cumbre.
