Aibby Camacho es una mujer única, que siempre nos recibirá con una sonrisa e irradia mucho amor. Ella es muy conocida en el rubro de la moda gracias a su trabajo como PR Manager de MAC Cosmetics, sin embargo, no todos conocen su proyecto lleno de amor: Dale alegría, alegría, alegría a mi corazón, el cual busca hacer feliz a las personas a través de detalles únicos que los sorprendan.
Aibby nos cuenta que tuvo una infancia muy feliz. Ella creció en una casa grande en San Miguel, rodeada de muchos miembros de su familia, entre ellos sus primos, sus padres y una persona muy especial, la cual fue una de las mayores influencias de su vida: Su abuela. “Ella me crío y estuvo siempre conmigo”, nos cuenta Aibby. Lo que más recuerda con cariño de su infancia (aparte del amor de su abuelita) es jugar en el parque con todos sus amigos (ella era la tomboy del grupo) y las celebraciones familiares en su casa. Toda esta felicidad que vivió en esta etapa de su vida la hizo ser la persona que es hoy.
Sin embargo, a los 31 años, vivió una experiencia fuerte en su vida: El fallecimiento de su abuelita. Ella decidió que eso no la destruyera, sino al contrario, la motive a dar felicidad a otros. Ella siempre busca robarle una sonrisa a quien sea: Desde el cajero del supermercado hasta sus amigos más cercanos. Fue con esta motivación que decidió crear Dale alegría, alegría, alegría a mi corazón. Ella nos cuenta: “Dale alegría, alegría, alegría a mi corazón es la deuda que yo tengo con la vida. Esta no es una marca de merchandising, es una marca que busca hacer feliz a otras personas ya que eso es lo que yo quiero: Dar felicidad y hacer feliz a otros. A cada uno de mis regalos les pongo, Alma, Corazón y Vida (como dice el vals criollo, el cual impactó mucho en su vida)“
Los productos que podremos encontrar en su marca son muy originales: Árboles de los deseos, libretas con mensajes inspiradores (los cuales tienen las frases favoritas de Aibby), copas de Champagne con mensajes felices, vajilla llena de elegancia, etc, los cuales celebran diferentes acontecimientos de la vida: Matrimonios, nacimientos, compromisos y cualquier otra ocasión especial que merezca celebración. Además, sus colecciones son permanentes y edición limitada. “¡Los productos vuelan! Hay algunos que me han durado solo dos horas a la venta” nos cuenta Aibby. Además, ella es muy minuciosa y exigente seleccionando los materiales de sus productos ya que le encanta que todo esté perfecto y cuidado al más mínimo detalle. “Todos son productos que yo usaría. ¡Son como mis hijos!, nos recalca.
Además, ella hace algo muy especial al entregarlos: Los entrega personalmente. A ella le gusta conocer a sus clientes, conversar con ellos y conocer sus historias.
Aibby nos dio un consejo muy importante para todo el que quiera emprender y fundar su propia marca: “Crean en sí mismos. Si tu crees en ti mismo y le pones ganas a todo lo que haces, todo saldrá bien. Además, tienes que dar un diferencial en tu marca y hacer todo con pasión”. Definitivamente Aibby es un ejemplo de esto y es una inspiración de felicidad y estamos felices de que comparta su alegría con todo el que le rodean. ¡Que siga dando más alegría a nuestros corazones!
Para conseguir los productos de Dale alegría, alegría, alegría a mi corazón puedes visitar su página en Facebook aquí.
